El gobernador Rodolfo Suárez y el ministro de Economía y Energía, Enrique Vaquié presentaron en San Rafael la convocatoria pública consultiva on-line para conocer los detalles técnicos del aprovechamiento multipropósito El Baqueano, en un mecanismo que sigue los criterios de transparencia e integridad en las contrataciones, de conformidad con la normativa Nacional y Provincial.
La convocatoria se hará a través de la Empresa Mendocina de Energía (Emesa), encargada de todas las etapas de planificación de una obra hidroeléctrica que es la más importante de las últimas dos décadas, y que aumentará la capacidad de embalse de agua, aportará energía limpia y sustentable al Sistema Argentino de Interconexión y creará un polo turístico en el Sur mendocino.
Esta modalidad consultiva, previa a la licitación, se realiza luego de un ordenado proceso que incluyó la aprobación de la Legislatura, la Audiencia Pública realizada de forma presencial en San Rafael y on-line el 17 de julio de este año, y la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental.
«Es una empresa que va a tener una inversión de más de 500 millones de dólares, con la particularidad de que también puedan venir privados a realizarlo y después cobrar la tarifa y el repago de la obra, porque es lo que hemos conseguido con el Gobierno de la Nación. Pero esto va a significar turismo, trabajo para las conductoras, para la metalmecánica”, afirmó Suárez.
La instancia que se abre en esta etapa tiene dos ventajas: por un lado, ofrece transparencia en el proceso, ya que las potenciales interesadas en presentarse en la licitación tendrán la oportunidad de consultar y estudiar todos los detalles técnicos que requiere la hidroeléctrica, último eslabón del circuito planificado para toda la cuenca del Diamante.
La segunda ventaja es que se agilizará el proceso licitatorio: los interesados tendrán un plazo de 60 días para interiorizarse en los detalles de una obra que incluye, entre otras cosas, una presa de hormigón compactado a rodillo (HCR) de 68 metros de altura con su correspondiente embalse, una obra de desvío del río que se utilizará durante los trabajos, obra de toma, túnel de aducción de 13,8 km, chimenea de equilibrio, tubería forzada y casa de máquinas.
Todos los interesados, además, obtendrán la documentación vía digital, a la que podrán acceder a través de un correo electrónico y del sitio de internet de El Baqueano. Son 3.500 páginas de rigurosos cálculos y planificaciones llevadas a cabo durante más de cinco años por expertos de Emesa, renombradas consultoras e instituciones educativas. De esta forma, Mendoza sigue no solo los procesos anticorrupción estatales, sino que se apega a una medida de buenas prácticas administrativas.
Cómo es la obra
Los interesados accederán a los cálculos y planos realizados durante más de cinco años por expertos de Emesa, especialistas de instituciones educativas y consultoras de larga trayectoria en la materia.
El Baqueano es un viejo anhelo de Mendoza: proyectada a finales de la década del 70, estaba pensada como una presa de materiales sueltos, con cara de hormigón aguas arriba, como Potrerillos, en la confluencia entre el arroyo Agua de la Mora y el río Diamante.
Los nuevos estudios geológicos determinaron que aguas arriba del sitio previsto había riesgo de desplazamientos de laderas. Durante 2018 se realizaron campañas geológicas para determinar la localización y modo de edificación más seguros. Así, se determinó que la histórica propuesta de Agua Mora quedaba descartada y que se construirá una presa de hormigón de gravedad HCR en una zona conocida como El Imperial.
En El Imperial está previsto construir una presa de 70 metros de altura, con una conducción en túnel de 15 kilómetros de longitud y un diámetro 5 metros, hasta la central El Baqueano, situada aguas arriba de la cola del embalse Los Reyunos.
El aprovechamiento tendrá varios componentes, cuyos cálculos ya se han concretado: una presa de HCR de 68 metros de altura, con su correspondiente embalse; una obra de desvío del río que se utilizará durante los trabajos, obra de toma, túnel de aducción de 13,8 km, chimenea de equilibrio, tubería forzada y casa de máquinas. El túnel trasladará el agua desde el embalse hasta las turbinas sin producir crecidas o bajadas bruscas de agua en el curso del río.
Su embalse tendrá un perímetro de 25 kilómetros y podrá almacenar 37,8 hectómetros cúbicos de agua de lluvia y de deshielo, lo que aumentará un 15% la capacidad de embalse del complejo del río. La hidroeléctrica aportará 120 MW de potencia, para generar 450 GWh al año y abastecer de energía a aproximadamente 60 mil hogares. Promoverá la creación de 1.000 puestos de empleo directo y cerca de 1.500 indirectos por servicios y obras asociadas.
La obra tendrá múltiples beneficios para la provincia: además de crear más de 2.500 puestos de trabajo directos e indirectos durante su ejecución, será capaz de producir 450 GWh por año, con potencia instalada de 120 MW, que garantiza energía para más de 60 mil hogares. También creará un nuevo polo turístico, porque culminará la ruta del Cañón del Río Diamante hasta Agua del Toro, hoy cortada a la altura de Los Reyunos.